Burundanga: la droga que asusta a todos, pero que aún nadie vio
Expertos dicen que no puede adormecer en segundos a una persona
Le pasó a la hermana de un primo de un amigo. Se supo a través de una cadena de mails de incomprobable procedencia y se contó mil veces en charlas de café o sobremesas. La burundanga -esa droga que, supuestamente, en segundos adormece a las víctimas para dejarlas a merced de delincuentes- está entre nosotros, aunque no se haya podido comprobar si las historias que se cuentan son reales.
La ciencia desmiente que una droga pueda actuar con la rapidez que le atribuyen a la escopolamina, tal su nombre científico.
Carlos Damín, director de Toxicología del Hospital Fernández, explica que tiene uso oftalmológico y que viene en polvo, gotas o ampollas, pero agrega: «No existe sustancia que espolvoreada genere un efecto inmediato». Pese a ello, el temor y la psicosis, hasta el momento, van ganando la partida.
Esta droga, tildada de muy temida, proviene de un grupo de plantas, varias de ellas de origen americano, con propiedades psicoactivas que han sido utilizadas a lo largo de cientos de años como hierbas medicinales, tales como el cacao, el sabanero, la datura y la mandrágora.
Por Manuel Ruiz | LA NACION